Bruno y Patricia, en el hotel de Bangkok donde están alojados.

Patricia y Bruno son vecinos de Gruncheiras, Coiro, y viajaron hasta Bangkok antes de la crisis del Covid-19. Llevan varios días intentando adelantar los vuelos de regreso sin éxito y temen quedarse atrapados en otro país de enlace

Bruno Gallego y Patricia Cortizo son una pareja de Cangas de 41 y 39 años, respectivamente. Viven en la parroquia de Coiro, en el lugar de Gruncheiras, y el pasado 9 de marzo emprendieron su viaje a Tailandia con total tranquilidad porque la crisis del coronavirus ni siquiera se sospechaba que situase a España y al mundo en un Estado de Alarma nunca vivido. Les dijeron que no había lugar a la preocupación y que podían disfrutar de sus vacaciones sin problema. Pero nada más lejos de la realidad. A los pocos días de pisar Bangkok comenzaron a llegar las peores noticias.

El 13 de marzo, desesperados y asustados, decidieron ponerse en contacto con la embajada de España y con la agencia de viajes para intentar adelantar su vuelta. Ahí se dieron cuenta de que el camino a casa no sería tan sencillo. «Turquía impide el vuelo a personas que lleven menos de 14 días fuera de España y nosotros no haríamos ese tiempo hasta el 23 de marzo pero corremos el riesgo de quedarnos atrapados en Estambul porque las cosas cada vez se están poniendo peor, no sabemos qué hacer si arriesgarnos a comprar otro billete o quedarnos aquí en Bangkok», explicaba Paula a morrazonoticias. Ahora están a la espera de recibir recomendaciones de la agencia sobre qué hacer, si arriesgarse o llenarse de paciencia y esperar. Mañana tendrán que tomar la gran decisión, será la aerolínea Turkish quien les exponga las opciones que tienen para que puedan decidir si finalmente se arriesgan a volar a Estambul e intentar que los reubiquen o bien adquirir nuevos billetes.

Su familia en Cangas, preocupada

Ante esta situación de incertidumbre, esta pareja ha transmitido en las últimas horas su preocupación al alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos. Sus familiares en Cangas están preocupados ante el cierre del espacio aéreo. «Lo prioritario es que vuelvan ya, aunque en Bangkok están bien viven con la incertidumbre de si podrán volver a su casa, cuándo, cómo y de qué forma. Ambos tienen que incorporarse al trabajo y no pueden estar fuera más allá de la fecha que tenían previta», indica Davinia Gallego, hermana de Bruno.

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