La limpiadora del Club de Jubilados de Domaio se topó a primera hora de la mañana de este jueves con la sorpresa de que alguien se había colado por la ventana de la cafetería durante la madrugada para hacer de las suyas. Unos 300 euros se llevó la persona o personas que participaron en este asalto, 95 euros en billetes que la responsable de la cafetería tenía reservados para pagar a un proveedor, 100 en monedas de cinco céntimos que acumulaba en un bote y el cambio de caja que había quedado para el día siguiente.
Pero los cacos no marcharon sin antes hacerse con un buen botín de chocolate: huesitos, piruletas, phoskitos y hasta algunos refrescos. Lo hicieron tras forzar una de las puertas laterales dejando todo revuelto. Sospechan que fue más de una persona. El Concello, como propietario del edificio, y ha presentado denuncia.
