Agentes medioambientales de la Xunta se trasladaron hasta Cangas para recoger los seis ejemplares, trasladarlos a Cotobade y analizarlos para determinar la causa de su muerte
La aparición de seis aves muertas o agonizando en la Lagua de A Congorza, en Cangas, ha obligado a activar el protocolo de gripe aviar, según el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona). Tras precintarse los accesos a este entorno natural anexo a Massó por precaución en la tarde del jueves, agentes ambientales se trasladaron a primera hora de la mañana de ayer hasta el paraje cangués para recoger los ejemplares afectados y trasladarlos al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Carballedo, en el concello de Cerdedo-Cotobade, para proceder a su análisis y estudiar las causas de su muerte. El protocolo de la gripe aviar obliga a su activación cuando se trata de seis aves o más las que resultan afectadas. Por este motivo, los técnicos accedieron con todas las medidas de seguridad, incluidos los EPIS para evitar cualquier contagio en caso de confirmarse que se trata de este virus.
Por cautela, y como medida de precaución hasta el resultado de los análisis, los servicios de emergencia municipales acordonaron la zona pese a tratarse de una propiedad privada y recomiendan a los ciudadanos no acceder a ella. Tampoco los animales. Aun así, usuarios habituales creen que la causa de la muerte de los animales es mucho más sencilla y podría estar en la alta disolución de las algas del agua estancada a causa de las altas temperaturas.
En el operativo participó también el Servicio de Emergencias de Cangas.