Julio Alonso, expatrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Vigo se encontraba ayer navegando con su familia en aguas de Cabo Estai cuando a eso de las doce de la mañana le pareció ver «algo que sobresallía del agua» y en ese momento «lo primero que se me vino a la mente es que era otro narcosubmarino pero cuando le vimos la cola ya supimos que era una tiburón enorme, tan grande como el barco». A ojo, Julio cree que «por lo menos medía 10 metros de largo y dos de ancho, todo un bicho que no había visto nunca».

Asegura que en ningún momento tuvo miedo porque «eso sólo es en las películas». Curiosidad, apenas dos días antes su pareja (la encargada de grabar con el móvil) había estado viendo una de las películas de Tiburón. «Esto te lo encuentras en verano, con la playa llena, y es un acojone», indica.

A pesar de su experiencia en el mar, Julio es incapaz de explicar por qué este tiburón se coló estaba tan cerca de tierra y supone que simplemente será «una casualidad provocada porque hay pocos barcos faenando y el ejemplar se adentraría nadando sin inconveniente alguno».

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