La concelleira en la presentación como candidata en las elecciones municipales junto a dirigentes del partido.

La primera teniente de alcalde y concelleira de Movilidad de Cangas, Iria Malvido, se ha pronunciado después de que en la madrugada del lunes al martes la Policía Local le diese el alto por conducir de forma «errónea» y tras hacerle la prueba de alcoholemia diese una tasa de 0,84 mg/l, lo que le ha provocado estar acusada de un presunto delito contra la seguridad vial.

Textualmente, el comunicado dice lo siguiente:

«Pido disculpas, desde la más absoluta humildad, por el terrible error que cometí cuando en la madrugada de ayer volví a casa después de asistir a las fiestas del Cristo de Cangas conduciendo mi vehículo y superando holgadamente la tasa de alcohol permitida. Soy consciente de la magnitud de mi error y renuncio de antemano, dada mi condición de cargo público, a cualquier circunstancia atenuante para justificar mi conducta.

Por tanto pido perdón a todos los vecinos y vecinas de Cangas y a toda la ciudadanía en general, pues la responsabilidad al volante es una obligación que nos atañe a todos. Y quiero transmitir mis disculpas de manera muy especial a las víctimas de los accidentes de tráfico porque en estas horas dolorosas para mí me vienen mucho a la cabeza las personas que han sufrido pérdidas personales o lesiones a causa del alcohol en la carretera.

Como persona tengo derecho a disfrutar de las fiestas de mi pueblo en compañía de mis amistades. Pero soy plenamente consciente de que eso debe ser compatible con el respeto a las normas que, como país democrático y avanzado, nos hemos dado. Y la seguridad vial es un ámbito, como otros muchos, en el que no caben excusas de ningún tipo. Por eso, desde la responsabilidad, renuncio de antemano a recordar lo que hicieron otros responsables públicos de partidos que me critican. Renuncio incluso a matizar informaciones incorrectas o directamente inventadas sobre los hechos previos que dieron pie al control de alcoholemia.

Lo importante es que esto no tendría que haber sucedido NUNCA. Y que mi dolor es menos importante que el que he causado a personas que confían en el proyecto político del PSOE para modernizar y cohesionar la sociedad allá donde ostenta responsabilidades de gobierno. Como mujer, socialista, feminista y demócrata lo asumo y me propongo convertirlo en una lección de vida. Soy cargo público, pero también soy un ser humano y cometo errores. Lo importante es aprender de ellos y asumir todo el peso de la responsabilidad.

Es por ello que he solicitado la baja temporal como militante del PSdeG-PSOE a la Ejecutiva provincial de mi partido. Es lo coherente. Como marcan los estatutos y el código deontológico comuniqué los hechos a la mañana siguiente a la Ejecutiva provincial y estoy a la espera de la decisión que tome el Comité Federal de Ética. Acataré con la misma disciplina de siempre la decisión que tome Ferraz. Mi conducta privada en nada debe perjudicar a las siglas del Partido Socialista Obrero Español al que me debo y por el que siempre seguiré trabajando con orgullo, porque algunos estamos en Política (con mayúscula) por convicción, por ideología y por amor a nuestro pueblo.

Agradezco las muestras de cariño del PSdeG-PSOE, desde el secretario general provincial y el secretario general local hasta todos y cada uno de los militantes que me envían mensajes. Y también de todos los vecinos, muchos de ellos simpatizantes de otras fuerzas políticas. Agradezco incluso los comentarios de la gente que me critica, pues comparto plenamente que quien conduce bajo los efectos del alcohol o tiene conductas poco edificantes debe pagar por ello. Siempre y en toda circunstancia, sin apelar al “y tú más” y en la justa proporcionalidad a los hechos. Un principio que en el Partido Socialista se aplica y no solo se predica.

Finalmente, quiero poner en valor todo el trabajo que el Gobierno local de Cangas, en unas condiciones difíciles, ha venido desempeñando en este período de algo más de un año. Hemos hecho cosas importantes y más que quedan por hacer en beneficio de nuestro concello y por eso me gustaría concluir apelando a que “los árboles no nos impidan ver el bosque”, dado que hay quien tratará de aprovechar esto para seguir embarrando, obstaculizando y echando abajo tanto lo hecho, como lo que ya está planificado y en marcha. Esa gente, que practica la política (con minúscula) y a la que todos y todas conocemos de sobra.

Pase lo que pase, muchas, muchas gracias a toda la vecindad de Cangas y a mi partido».

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