El edificio donde residen los vecinos, frente a la Finca comida por la maleza.

Los vecinos del entorno de la Finca do Conde de Rapadouro, en Cangas, llevan más de 5 años presentando instancias en el Concello para pedir “que actúe sobre este terreno” situado frente a un edificio de viviendas desde las que día tras día tienen que sufrir las consecuencias de la maleza que inunda la parcela, sin desbrozar desde hace al menos seis años. “La última vez que fuimos al Concello nos aseguraron que antes del 31 de mayo estaría desbrozada por el riesgo de incendio”, desvelan y a 1 de junio “todo sigue exactamente igual”.

“La maleza está altísima, hay árboles enormes, y cada vez es más común ver ratas, mosquitos tigre, otros insectos e incluso jabalíes merodeando por la zona. Se han formado incluso guaridas de jabalíes dentro de la finca”, describen la situación que, consideran, “no solo afecta a la convivencia, sino que supone un riesgo serio para la salud de los vecinos”.

La maleza se come la finca.

Además, explican, “en la zona vivimos familias con niños pequeños, que están expuestos diariamente a este entorno insalubre y peligroso”, denuncian, donde “ya hubo un incendio en esta finca hace unos años y tenemos miedo real de que vuelva a suceder”.

Los afectados quieren aclarar que las quejas no solo provienen de un vecino sino que “hemos protestado varios residentes, y también la comunidad de propietarios a través de su empresa administradora”. 

Aseguran que desde el Concello les dicen que no tienen los datos de los propietarios pero consideran que “no puede servir de excusa” como para no actuar. “Cuando hay un riesgo evidente para la población, el gobierno local debe actuar de forma subsidiaria y urgente”, sentencian los vecinos, que exigen “una solución ya”. “Esto no puede seguir así verano tras verano”, urgen mientras se preguntan “qué más tiene que pasar para que se tomen medidas”.

Según ha podido saber Atlántico, los propietarios de esta finca residen fuera de Galicia. Hasta hace unos años un vecino era el encargado de su cuidado pero desde que este hombre no pudo continuar con su labor quedó completamente dejada.

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