Con 63 casos hoy, la alcaldesa de Marín, María Ramallo, hace un llamamiento a sus vecinos para que no realicen reuniones familiares que excedan de las personas convivientes. Las nuevas medidas anunciadas esta mañana por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, poco cambian las reglas en este municipio, en riesgo medio-alto, salvo porque el toque de queda se adelanta a las 22:00 horas y porque el cierre perimetral desaparece, aunque eso no significa libertad de movimiento.
Desde la Xunta y desde el Concello se recomienda «quedarse en casa» y sólo hacer lo imprescindible. De hecho, los municipios con los que linda Marín, Pontevedra, Moaña y Bueu, sí están cerrados perimetralmente.
En cuanto a la hostelería, continuará abierta hasta las 18:00 horas, con un 30 por ciento de aforo en el interior y un 50 en exterior. Las reuniones en el ámbito privado como también en el público quedan limitadas a 4 personas.