Los vecinos del entorno de Rodeira, y más concretamente de la calle Rodeiriña, en Cangas, se despertaron sobresaltados a las 7:00 horas de la mañana de ayer ante el ruido que provenía de la calle. Comprobaron que varios camiones de gran tonelaje estaban trabajando en la obra donde se construyen los apartamentos de Rodeira y esto les hizo llamar a la Policía Local ante la prohibición, dicen, de que perturbe el descanso de los ciudadanos antes de las 8:00 horas de la mañana.
Una patrulla de agentes, relatan los denunciantes, se personó pocos minutos después en el lugar y dio aviso a la empresa que se encuentra trabajando en las obras para que pusiera fin a las molestias pero lejos de cesar hizo caso omiso y continuó con su labor. Esto es lo que manifiestan los vecinos, que no dudaron en volver a llamar a la Policía Local a las 7:30 por el mismo motivo.
Pese a que la obra cuenta con todos los permisos en vigor, desde su inicio ha generado controversia en el vecindario y en gran parte de la localidad. No es la primera vez que los residentes ponen en conocimiento de las autoridades lo que ellos consideran irregularidades. Además de lo ocurrido ayer, también criticaron la falta de limpieza por la circulación de camiones con las ruedas llenas de barro o un vertido al regato del Saíñas por el que el dueño del Hotel Playa, promotor de los apartamentos, fue sancionado en las últimas semanas.