Las aulas de electricidad podrán abrirse a lo largo de la próxima semana. Las obras en el IES María Soliño están en plazo
Poco a poco la normalidad va llegando a los centros educativos de la comarca de O Morrazo arrasados por la borrasca Martinho, llevándose parte de los tejados de los institutos Rodeira y María Soliño y dejando desperfectos de consideración en su interior como consecuencia de la lluvias posteriores. Esta semana que está a punto de terminar la empresa contratada por la vía de la urgencia por la Xunta se ha dedicado a instalar una nueva cubierta en el centro de cara a poder retomar cuanto antes la actividad en las aulas dedicadas a música y a apoyo. Según informa la consellería de Educación, las obras “ya están prácticamente finalizadas” y eso permitirá que el próximo lunes los alumnos vuelvan a ocupar estos espacios de centro de Rodeira que habían dañados por el viento en la madrugada del martes 21 de marzo. También se prevé que a lo largo de la semana se recuperen las aulas de instalaciones eléctricas.
El director territorial de la Consellería de Educación, Ciencia, Universidades y FP en Pontevedra, César Pérez Ares, se desplazó durante la mañana de ayer al IES Rodeira para comprobar el estado de los trabajos.
También visitó el IES María Soliño, el centro educativo que quedó en peor estado. De foma paralela y como prioridad, la misma empresa también está llevando a cabo labores de reparación que, revelan desde Educación, “avanzan a buen ritmo y de acuerdo con la hoja de ruta establecida”.
En ambos casos, Pérez Ares mantuvo reuniones informativas con los equipos directivos de cada uno de los centros en las que participaron representantes de la Unidad Técnica de Obras, de la Inspección Educativa y de la empresa constructora.