Los problemas de filtraciones de agua que tiene el edificio del Concello de Cangas dan lugar a imágenes poco usuales como esta, que destierra la estampa de los típicos cubos colocados estratégicamente para recoger la gota. Es un nuevo sistema pendiente de patentar instalado en los últimos días en el baño masculino de la segunda planta del consistorio cangués y ya ha dado lugar a más de una broma entre los trabajadores municipales que suelen utilizarlo. Una manguera conecta el falso techo del despacho contiguo con uno de los dos inodoros de hombres para asegurarse que el tiesto nunca se llena y que el agua acaba en un lugar sin riesgo de desbordamiento.