Rita Dacosta con su libro "Soy una más" que esta tarde ha presentado en el Museo Torres de Marín.

La sonrisa que se dibuja en su cara es una mirada firme al futuro, un adiós al pasado pero sin perder de vista lo aprendido no hace tanto tiempo, apenas un año. Rita Dacosta es una vecina de Cangas, nacida en Bueu, como bien recuerda orgullosa a sus 48 años. Sin embargo hoy ha sido la protagonista en Marín, donde ha presentado su poemario “Soy una más” a iniciativa de la Asociación Mulleres de Abeiro. Lo importante no es el lugar sino el fin y este no ha sido otro que superarse, utilizar las letras como terapia para ayudar a esas mujeres que, como ella, fueron diagnosticadas de cáncer de mama.

MN: Eres una más… ¿Qué significa?

RD: “Soy una más”, de tantas, porque somos muchas. 1 de cada 8 mujeres padecerá cáncer de mama a lo largo de su vida. Es un dato abrumador y sin embargo es una enfermedad que generalmente se lleva en silencio y creo que es algo para esforzarnos en cambiar. Nos debemos a nosotras mismas el darle visibilidad a la enfermedad, porque somos muchas y es muy importante concienciar a la población de que esta enfermedad existe. Yo misma, no era consciente de este problema tan importante de salud hasta que me sucedió a mi. Al inicio de diagnosticarse el cáncer, yo tenía muchas dudas, estaba realmente asustada y no entendía los términos empleados por los médicos. Entonces acudí al médico que colabora con ADICAM, el Dr. Jorge Cameselle. Estuvimos hablando prácticamente 1 hora y al finalizar la conversación le pregunté:  ¿Dr. somos muchas verdad?. Y el me contestó con resignación: Muchas no, sois demasiadas…. Y por mi mente pasó la frase que hoy en día es el título del libro. Y yo…..”Soy una más”. 

MN: Una más que se cura también…

RD: Si, por supuesto, fue un camino largo y duro pero sigo aquí, ya sin cáncer aunque con tratamiento de prevención pero muy feliz.

MN: ¿Se puede ser feliz después de un cáncer?

RD: Rotundamente SI.

MN: ¿Qué te llevó a dejar por escrito tus vivencias?

RD: Cuando te diagnostican un cáncer de mama, entras en shock, te inunda una tristeza profunda, te preguntas un millón de veces ¿por qué a mi?, aparecen sentimientos de impotencia, frustración, estrés emocional, rabia, miedo…. Y es en esos momentos, en los que tus sentimientos están a flor de piel, cuando surgen cosas a veces maravillosas. Sentí la necesidad de cambiar mis pensamientos y me agarre a un lápiz y me puse a escribir. Me di cuenta que de forma espontánea surgían versos y a veces estrofas que debía anotar para poder leerlas, releerlas y llorarlas. Me hacía bien, mucho bien. Fue mi mejor terapia.

MN: ¿Qué buscas con este poemario?

RD: Este poemario nació sin ninguna pretensión, tal y como dije antes ha sido mi mejor terapia para conseguir ver la luz. Sin embargo, una vez confeccionado el libro, tiene un objetivo muy claro y es convertirlo en un LIBRO SOLIDARIO. Los beneficios que consiga con la venta del libro serán para ADICAM, porque les tengo mucho que agradecer. Y además es una forma bonita de seguir dándole visibilidad a la enfermedad.

MN: ¿Qué palabra definiría tu lucha?

RD: AMOR. El amor lo mueve todo. Mis motores, mis hijos de 5 y 10 años. Quería estar bien por mi pero sobre todo por ellos, porque mi deseo solo es verlos crecer y hubo algún momento en mi vida, sobre todo al inicio del diagnóstico que pensé que me lo iban a arrebatar.

MN: Tu familia fue un pilar pero también una preocupación ¿cómo lo vivió?

RD: El tratamiento oncológico es muy largo, quimio, operaciones, radio…te pasas un año que no sales del hospital. En momentos así tienes que rodearte de las personas que más te quieren. En mi caso necesite el apoyo incondicional de mi marido, el acompañamiento de mi familia, la complicidad de las amigas…etc. Cada pilar hace una función distinta pero igual de importante. Al ser un proceso tan largo no puede recaer todo en una persona, sino que se necesita mucha ayuda.

MN: ¿Cómo te ayudó Adicam a lo largo del proceso?

RD: ADICAM es otro pilar fundamental en el proceso de curación. Yo llegue a ADICAM totalmente en shock recién diagnosticada y me abrieron los brazos de manera incondicional. Recibí muchísimo cariño y comprensión y conocí un mundo nuevo. Un mundo lleno de afecto, de atenciones, de personas que se desviven porque estés bien. Y vi como un montón de mujeres que habían sido diagnosticadas, ya habían terminado el tratamiento y eran FELICES. Y eso me gustaba, me gustaba mucho verlo, porque aunque yo no estaba en ese momento, pensaba que quizás en un futuro yo también estaría así.

MN: Si tuvieras que dirigirte a aquellas personas que acaban de recibir la noticia ¿qué les dirías?

RD: Que la ciencia avanza mucho y rápido. Que intenten encontrar la paz que en ese momento se pierde, de alguna forma, para que el cáncer solo sea una enfermedad física y no te genere una enfermedad mental y sobre todo que no se aíslen, que vengan a ADICAM que se van a sentir mejor seguro.

Soy una más, puede ser una lectura idónea para aquellas personas que están pasando por un cáncer porque cada poema es un pequeño aprendizaje real de vida y quien sabe, humildemente pienso que puede ayudarles a vivir este problema de salud quizás desde otra perspectiva porque es un libro lleno de mensajes positivos.

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