La CUT considera que es este arma es una «tortura» y, además, especialmente peligrosas para personas con patologías previas y embarazadas
La CUT pide la retirada «inmediata» de la pistola táser que utiliza la Policía Local de Moaña y que fue adquirida a principios de este año por el Concello. De hecho, en febrero los agentes asistieron a un curso de formación donde se les explicó cómo utilizarla. El agente responsable de impartirla explicaba que se trata de un “arma no letal de uso exclusivamente policial que mediante pulsos eléctricos controla los músculos motores de un agresor”.
La organización sindical considera que el uso de ese arma afecta de manera grave a la salud de las personas con patologías previas, menores o mujeres embarazadas, sin que en un operativo policial y en una intervención con la lógica tensión se pueda distinguir si los agentes están o no en presencia de una persona de riesgo.
Para el sindicato no resulta tolerable imponerle a los Cuerpos de Policía Local el uso de nuevas armas que amenazan de manera clara la integridad física de los vecinos y vecinas, y considera que no existe ninguna nueva necesidad social que justifique su introducción en el repertorio de armamento.
Insiste en que las corporaciones municipales están tratando la conflictividad social y la pobreza en el concello como un problema policial, introduciendo gastos espúreos, cuando la auténtica necesidad es un plan para lo combate de la pobreza y la exclusión, ya que estos sectores serán. sin duda, los más castigados por las nuevas medidas.
Además, el sindicato quiere advertir a los demás concellos gallegos que el adquisición de tal armamento no es solución la ningún problema, más bien al contrario, introduce nuevos riesgos y conflictos para una población ya cansada de soportar las derivas represivas nos sus municipios