Las viviendas de uso turístico recogidas en el Registro autonómico y ubicadas dentro del municipio de Bueu comienzan a recibir las cartas de la empresa concesionaria del agua, Aqualia, en las que avisa a los propietarios de que en el cuarto trimestre del año se verá incrementado el recibo del consumo amparándose en el artículo 84 del regulamento municipal. El motivo es el mismo que en Cangas, porque «la tarifa contratada no se ajusta a los usos reales del inmueble», manifiestan calificando la situación de “uso fraudulento”.

Por este motivo, añaden, girarán el recibo trimestral ajustado “a la tarifa comercial”, mientras que en la localidad vecina se consideraba de uso “no doméstico” y, por tanto, “industrial”. En Bueu rondan los 30 euros, en Cangas hay cantidades que superan los 1000 euros.

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