Los técnicos de Fenosa verificaron a última hora de ayer que no existían incidencias en ningún barrio. La mayoría de los problemas se debieron a la caída de árboles sobre tendido eléctrico
Los teléfonos de los servicios de emergencias de Cangas y Moaña no pararon de sonar en todo el fin de semana y también en el día de ayer. Pero si hubo una jornada estresante esa fue la del domingo y la causante, la borrasca Herminia. Aunque la estación MeteoCangas registró en 24 horas una precipitación de 53,4 mm, el protagonista fue el viento el protagonista con ráfagas que alcanzaron los 86,9 Km/hora que dejaron un reguero de incidencias en toda la comarca. Afortunadamente ninguna tuvo consecuencias para la salud de las personas, pero los servicios de emergencias, Protección Civil y Policía Local de Cangas y Moaña, no dieron abasto para retirar árboles caídos, contenedores volcados, cables por el suelo o taludes venidos abajo.

MOAÑA
En el caso de Moaña, lo más grave fueron los cortes de luz que afectaron a diversas zonas del municipio durante la tarde del domingo y que en muchos casos se prolongaron hasta la tarde-noche de ayer lunes. Se produjeron en las parroquias Berducedo, donde hubo viviendas que permanecieron más de 24 horas sin electricidad, y de Meira donde también se repitieron a mediodía y en la tarde del lunes. A última hora, en torno a las 19:30 horas también se registraron dos cortes más, en la zona de Fanequeira- Isamil y en O Latón, por la caída de un árbol sobre la línea.
La alcaldesa de Moaña, Leticia Santos, y el edil de Obras e Servizos, Xosé Daniel Costas, mantuvieron contacto constante con Fenosa para transmitir su «preocupación» por los problemas que supone no disponer de electricidad en las viviendas durante un tiempo tan prolongado. Finalmente, a las 21:30 horas todos los barrios se encontraban ya sin incidencia alguna. Aun así, el seguimiento continuará también durante el día de hoy donde el Concello revisará los cuadros de alumbrado público para verificar que se rearmen y los relojes de encendido estén correctos.
También en Xalde se derrumbó un talud de tierra que cortó por completo el camino o en la subida a San Lourenzo varios árboles no aguantaron la fuerza del viento y acabaron rompiendo. La subida A Fraga, como suele ser habitual, también se vio afectada por estos incidentes y los contenedores de la PO-551 acabaron tumbados sobre el asfalto, algunos de ellos invadiendo la calzada.
CANGAS

En Cangas se atendieron más de medio centenar de llamadas de ciudadanos que alertaban de póster telefónicos a punto de caer o ya en la calzada, señalización vertical también en riesgo o letreros publicitarios que volaban por los aires. Todas ellas se lograron asegurar con rapidez, a excepción de la rúa do Casas, situada en la parte trasera del CEIP Espiñeira de Aldán, que a última hora de ayer permanecía cortada al tráfico por la caída del tendido eléctrico a la espera de que la empresa acuda hasta este punto para solventar el problema.
Los concellos de Cangas y Moaña echaron mano de sus redes sociales para pedir precaución y responsabilidad a sus vecinos ante la alerta roja meteorológica y prohibieron las actividades al aire libre.