El cambio de empresa para la explotación de la piscina municipal de Moaña no ha gustado a la oposición. “Es una segregación que nadie entiende”, afirman desde el PP quien denuncia que “a cinco años de la finalización del contrato se tome en consideración esta segregación a favor de una y empresa creada “a doc” hace unos meses con un capital social de 3.000 euros para esto, y que el gobierno del BNG no había informado absolutamente a nadie de este tema hasta que los trabajadores comenzaron a quejarse de actuaciones de la actual concesionaria”. “No queremos pensar lo que pasará con una empresa sin prácticamente ninguna garantía ni capacidad financiera conocida”, advierten.
Tampoco entienden «que el gobierno del BNG leve meses sin querer recibir a los trabajadores y no le haga ni caso a CIG que es el sindicato que los representa».