El gobierno local valora muy positivamente la celebración en pequeño formato de las Fiestas de la Virxe do Carme y utilizarán el mismo sistema
Las concejales Marián Sanmartín y Raquel Soage, encargadas de la gestión de las Fiestas, se reunieron esta mañana para realizar un balance de la semana de las Fiestas de la Virxe do Carme después de su día grande y de que los festejos hayan tenido que adaptarse a la situación tan excepcional y delicada por mor de la crisis sanitaria de la Covid-19. Para el Gobierno local, la valoración es “muy positiva”. “Dentro de lo que pudimos hacer, la gente respondió muy bien, no se produjo ningún incidente y todo el vecindario que participó de los actos programados se comportó con muchísima responsabilidad”, aseguró Sanmartín.
La apuesta por el pequeño formato y por la diversificación de las actividades para evitar aglomeraciones en un punto específico de la localidad dieron muy buenos resultados, pudiendo de esta forma mantener los festejos a menor escala, con el motor económico que también suponen para el comercio y la hostelería locales, al tiempo que se cumplió con todas las medidas de prevención y higiene recogidas en el decreto de nueva normalidad.
Ahora, segundo adelantó Sanmartín, “ya estamos trabajando en las demás actividades de dinamización cultural que se realizarán durante las próximas semanas”, tratando de cerrar nuevas actuaciones musicales por las calles y plazas. “Así, iremos anunciando poco a poco estas actividades porque queremos ir acompasados con la situación sanitaria en cada momento, siempre estando muy atentos de los datos y de las indicaciones de las autoridades pertinentes”, afirmaron las concejales.
Habrá Fiesta Corsaria
Otra de las cuestiones que Soage y Sanmartín adelantaron esta mañana es que Marín sí que tendrá Fiesta Corsaria el 15 de agosto, para la cuál se está trabajando con el objetivo de poder realizarla, también, siguiendo la filosofía del pequeño formato que tan bien funcionó en el Carme. “Vamos a permitir que se coloquen mesas, pero estamos trabajando en los requisitos que deberán cumplir con respeto al aforo máximo, a las distancias mínimas, etc. Queremos que todas las medidas queden claras para garantizar la seguridad y la tranquilidad del vecindario”, insisten.
Tanto la feria de artesanía como la “Vila mariñera” estarán, pero no se permitirán los puestos de venta de comida en la Alameda. Por otra parte, tampoco habrá el espectáculo final, pero se propondrá otras alternativas que eviten la concentración de gente en un mismo punto.