Usuarios de esta céntrica zona verde temen que el agua estancada pueda ser foco de insectos como el mosquito tigre
La fuente cibernética situada en el corazón de los Jardines do Sinal, más conocidos como la Alameda Nueva, en la zona de Cangas más concurrida por vecinos y visitantes, presenta un aspecto deplorable. El agua es de color marrón verdoso, el fondo acumula residuos propios de la mala conservación y del paso del tiempo y el entorno está repleto de excrementos de gaviota y pintado con grafitis poco decorativos.
Usuarios habituales que se cobijan del sol en los banquitos aledaños se quejan de que el agua estancada desprende un fuerte olor que se percibe desde varios metros a la redonda. También alertan de la presencia de gran cantidad de insectos por la suciedad que acumula y las altas temperaturas del verano. Especialmente inciden en que esto puede suponer un punto de riesgo para los ciudadanos por albergar especies como el mosquito tigre. Precisamente, en agosto de 2023 Cangas detectó al menos un caso, por lo que el municipio fue integrado en el comité técnico creado por la Consellería de Sanidade, precisamente, para reforzar el conocimiento sobre la vigilancia y control del mosquito tigre por parte de los técnicos de los concellos y poder reaccionar con rapidez ante la constatación de algún caso grave.
Según ha podido saber Morrazo Noticias de fuentes municipales, esta fuente cibernética se sometía al menos una vez al año a una puesta a punto en la instalación eléctrica por parte de los trabajadores del Concello y se limpiaba en profundidad como mínimo cada seis meses. Sin embargo, este proceder cambió con la llegada del actual gobierno tripartito, que desde que tomó posesión no ha ordenado que se friegue el principal elemento decorativo de estos jardines.
Los vecinos lamentan que el municipio presente este aspecto durante los meses del verano y aguardan a que el Concello acceda a su limpieza antes de las Fiestas del Cristo del mes de agosto.