Un agente de la Policía Local asiste al hombre todavía tirado en el suelo del camino de la parroquia de Quintela.

Una vecina dio la voz de alarma a última hora de este domingo de que había un hombre tirado en un camino de la parroquia de Quintela. La mujer trasladó a la Policía Local su preocupación porque no sabía si se encontraba con vida. A su llegada, los agentes comprobaron que se trataba de un hombre de mediana edad que, efectivamente estaba tumbado en el suelo con un golpe en la cabeza y un importante dolor en el brazo.

Parece que hombre podría haberse encontrado indispuesto y por eso cayó sobre el asfalto golpeándose con fuerza en ambas partes. Tampoco era capaz de levantarse, por lo que decidieron llamar al servicio de emergencia para que lo atendieran.

La patrulla de la Policía Local tuvo que trasladar al varón unos 600 metros hasta el lugar en el que había quedado estacionada la ambulancia ya que el camino esta demasiado estrecho y el vehículo no podría acceder. Una vez fue atendido por los sanitarios en el punto lo trasladaron hasta el hospital Povisa para revisarle las magulladuras de las que se aquejaba.

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