- Esta obras en la estación de bombeo de Vilariño debían de realizarse con celeridad para que el daño medioambiental fuese mínimo pero, según los vecinos, los trabajos se realizan con lentitud mientras las tuberías llevan un mes evacuando de forma constante aguas residuales
- La obra estaba ejecutándose sin los correspondientes permisos de Augas de Galicia, que hoy han acudido a tomar muestras sobre las que adoptarán las medidas administrativas oportunas. «Es un atentado medioambiental a la vista de todos», manifestaban algunos vecinos a Morrazo Noticias
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, Seprona, ha impuesto una denuncia a la UTE Gestión Cangas, encargada de la red de aguas en el municipio, por un vertido continuado a la ría de Aldán proveniente de las obras de renovación de las bombas de la estación de Vilariño (EBAR). Los vecinos alertan que durante al menos un mes las tuberías están aliviando agua sucia de la red de saneamiento de la parroquia de O Hío «en grandes cantidades», explican, sin que la empresa ponga freno en todo este tiempo. «Toda la porquería diluida por la lluvia está acabando en la ría de Aldán sin que a nadie le preocupe el daños medioambiental que está ocasionando. Esto es un atentado a la vista de todos. Entendemos que la obra supone un riesgo y ya contábamos con alguna fuga pero es inconcebible que se realicen con tanta desidia», sentencian.
La alarma vecinal por los daños que este vertido provoca en todo el litoral y en el sector del mar ha provocado la intervención del Seprona y también de Augas de Galicia, que hoy se ha personado en Vilariño para llevar a cabo una inspección sobre el terreno y tomar muestras con las que adoptarán las medidas administrativas oportunas.
Cesión do terreo e sin permiso
Según la administración autonómica, el pasado 27 de noviembre, en una inspección rutinaria, los técnicos del Programa de Control de Vertidos de Augas de Galicia localizaron el vertido. Posteriormente, el día 1 de diciembre, entró la primera alerta a través del 112. Ante esta situación, desde Aguas trasladaron su preocupación al jefe de la UTE, encargado de las obras, quien informó que en la EBAR se estaba instalando un areeiro y el día 24 el terreno que rodea la instalación cedió, llenando de arena todo el pozo e inhabilitado las bombas. Derivado de este hecho, las aguas residuales se estaban vertiendo directamente al dominio público desde un pozo previo mediante un sistema de bombeo, además de contar con otro sistema de impulsión cara el arroyo de Vilariño que vertía la mezcla de agua con áridos, consecuencia del derrumbamiento hasta solucionar el problema y finalizar la obra. Los técnicos, además, le informaron que para llevar a cabo estas actuaciones debían contar con autorización de Augas de Galicia.
Durante la visita de ayer técnicos de Augas de Galicia se volvieron a poner en contacto con la empresa, quien indicó que el bombeo ahora mismo funciona, por lo que «ya no hay vertido directo de las aguas residuales al dominio público, si bien las obras en el areeiro continúan, por lo que hay vertido de aguas con áridos, en las que indican que se les están filtrando también aguas residuales», explican desde la Xunta.
La empresa desconoce la sanción
La UTE Gestión Cangas, con la que se ha puesto en contacto Morrazo Noticias, asegura no tener constancia de la denuncia de la Guardia Civil y se limita a recordar que esta obra «está aprobada y autorizada por el pleno del Concello porque, de lo contrario, no se podría hacer aunque esté en el Plan de Inversiones».
No es la primera vez que la empresa recibe una sanción que finalmente es abonada por el Concello de Cangas sin que el gobierno local tome represalia alguna sobre la concesionaria. Por lo que, es probable este desconocimiento tanto en cuanto el dinero sale de las arcas públicas.
La previsión de la empresa es poder finalizar el areeiro a semana que viene.