Llevaba días estacionado en la Avenida de A Coruña obstaculizando la acera e impidiendo el paso de los peatones. Quien lo dejó así le echó tanto morro que se arriesgaba a ser sancionado con tan solo hacerlo nos minutos. Sin embargo, y según los vecinos, de ahí no se movió en mucho tiempo. Tanto es así que ayer por la mañana la Policía Local se personó en el lugar para tratar de esclarecer por qué la camioneta seguía ahí sin inmutarse. Fue en ese momento cuando a los agentes le saltó la alerta de que había sido robada en Ávila.
El protocolo marca que ante una situación así la Policía Judicial debe inspeccionar el vehículo para recoger las posibles huellas que pueda haber y cotejarlas con las registradas en el archivo por si hubiese coincidencias para cazar al autor o autores. Sin embargo, y según fuentes próximas a lo ocurrido, poco después el furgón desapareció del lugar en el que llevaba estacionado varios días. Sobre lo ocurrido, un malentendido.