Desde el BNG de Marín trasladan su «malestar y desacuerdo absoluto», con la decisión del cierre “ temporal” de la oficina de ABANCA en la parroquia de Seixo. La sucursal lleva cerrada 15 días, agravando los problemas de los comerciantes de la zona ante la nueva situación del Covid-19.
Seixo es el segundo núcleo en población y comercios de Marín y, según indican, sus comerciantes y vecinos se ven obligados a desplazarse hasta el centro del municipio para hacer sus gestiones, los que pueden en sus propios vehículos y los que no en taxi o pidiendo favores a los más allegados.
Aseguran desde la formación nacionalista que «no todo el mundo dispone en la casa del dinero necesario para ir la plaza o supermercado» y, fundamentalmente destacan la «necesidad de realizar gestiones de aquellos que tienen negocios». Por este motivo, consideran «ilógico» que estando en estado de alarma «y teniendo todo el lado de la casa tengan que hacer malabares para acceder su dinero, para poder sobrevivir».