Manifestación do sector hostelero en Cangas en maio.

Las asociaciones consideran que la exención de las terrazas podría crear agravio con aquellos establecimientos que no tienen pero creen que «es mejor una medida igualitaria que no tomar ninguna»

Ninguna de las tres asociaciones que representan al sector de la hostelería de Cangas, Areca, Fecimo y Casco Vello, han mantenido reunión alguna con el PP cangués durante la pandemia ni tampoco para recoger sus inquietudes de los afectados por las restricciones. Así lo confirman y de ahí que estén sorprendidos por la moción que los populares presentaron el pasado viernes en el pleno ordinario reclamando más apoyo al sector. Es por eso que el presidente de la Asociación de Restauradores de Cangas (ARECA), Gustavo Soliño, pide que no se «politice» al colectivo ni la situación que está atravesando por que «no se puede poner el foco solo en el Concello, el resto de administraciones también tienen que ayudarnos».

Por su parte, el gerente de Fecimo, Rodrigo Pastoriza, defiende que «obviamente todas las medidas que supongan menos cargas para las empresas (sea cual sea el sector) son bienvenidas» en relación a la exención de la tasa de las terrazas, cuestión propuesta en abril de 2020 por esta Federación, pero argumenta que en ese momento «desde el Concello se nos trasladó a las asociaciones que recortar los ingresos municipales supondría recibir menos ingresos de transferencias desde el gobierno central, repercutiendo esto en las capacidades futuras de inversión del Concello, y que se compensaría la non exención del cobro con más gasto en los sectores afectados».

«Por tanto, si desde el Concello nos trasladan que esa es la realidad de Cangas, no vamos a pensar que técnicos y políticos nos están mintiendo. En tal caso esa labor de control e inspección le corresponde a la oposición, pero como he dicho antes, con nosotros no han hablado para desmentirlo», explica Pastoriza en alusión a que en otros concellos sí se pueda estar aplicando esta exención.

Una exención ¿equitativa?

Tanto Areca como Fecimo consideran que la exención podría suponer un agravio con aquellos locales que no cuentan con terraza y que tuvieron que permanecer cerrados totalmente cuando únicamente se permitía la atención al aire libre. Sin embargo, «por la urgencia del momento, todas las administraciones están optando por la vía de las medidas igualitarias sin atender a la realidad de cada empresa». Por tanto, dentro de lo malo, si la falta de equidad fuese el problema, «es mejor una medida igualitaria que no tomar una medida porque no todos se benefician en el mismo grado».

Aun así, recuerda que Fecimo ya propuso también, además de las exenciones en tasas municipales (basura, terrazas,..), ayudas directas al sector según las pérdidas demostrables (opción que se descartó por agilizar la burocracia en la gestión), que se llevasen a cabo acciones de incentivo al consumo como el programa de bonos (opción que se descartó también por las urgencias del sector) y actividades de promoción de la hostelería local que nos consta que se está trabajando desde las concellerías de Turismo e Promoción Económica.

El edil de Facenda, Mariano Abalo, asegura que desde el gobierno local «vamos a respetar lo que se acuerde en la Mesa que volverá a reunirse este miércoles». «No puede ser un elemento de confrontación política sino producto de una negociación y consenso común», opina.

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