Los vecinos de la calle Rodeiriña llevan cinco meses esperando que el Concello pinte la señalización para la delimitación de las plazas de aparcamiento y los pasos de peatones. «Hay riesgo real de atropello», advierten
El problema de aparcamiento en Cangas ha llegado a las manos. Un hombre propinó este viernes por la noche un puñetazo al conductor de un vehículo durante un enfrentamiento por un plaza de aparcamiento en las inmediaciones de los campos de fútbol del Kenyata, en Rodeira. Según fuentes policiales y vecinos testigos de los hechos, la pareja de la persona agredida estaba reservando el sitio a su marido y cuando este aparcó el vehículo otro hombre, el presunto agresor, dio al conductor un puñetazo en la cara desde el exterior a través de la ventanilla dejándole el pómulo marcado por el golpe. Ambos son vecinos y conocidos del barrio. La víctima ha presentado ya denuncia ante la Guardia Civil.

Y lo que podría ser un hecho aislado se está convirtiendo en algo habitual en la calle Rodeiriña y en sus accesos. Sus vecinos llevan pidiendo al Concello el pintado y señalización en todo el vial, asfaltado el pasado mes de marzo. Aunque el gobierno local les comunicó que se llevaría a cabo solo una semana después, eso no se ha producido y aparcar y circular es una operación de riesgo. No existen pasos de peatones, por lo que vecinos y viandantes, muchos en estas fechas dada la afluencia de usuarios en la playa de Rodeira, tienen que conducir con mil ojos ante el riesgo de atropello. «Yo mismo casi atropello a un niño», reconocía uno de los vecinos impulsores de una campaña de cartelería para denunciar el abandono y la dejadez en todo el barrio. Temen que la situación pueda agravarse y, sobre todo, que tenga consecuencias irreversibles.
Las plazas de aparcamiento no están delimitadas, cada conductor aparca donde y cómo le apetece hasta el punto que «donde antes estaban los contenedores ahora hay veces que se aparca hasta en cuarta fila», describen. Las señales verticales colocadas en diciembre de 2024 para prohibir el estacionamiento en uno de los lados de la calle y facilitar la entrada y salida de los camiones a la obra de construcción de los apartahoteles están ladeadas y la recogida de residuos, como es el caso de las pilas, no es tan frecuente como debería. Según una de las pancartas, el recipiente instalado en una de las farolas fue colocado en 2023 y dos años después no se ha recogido.
Según la alcaldesa, Araceli Gestido, la previsión es que la empresa que se encargará del pintado de este vial y del resto de puntos que requieren una nueva señalización horizontal comience los trabajos este mes de agosto, una vez finalice la obra de saneamiento en Longán que obligó al cambio de las tuberías de saneamiento.