Finalmente ha ocurrido, aunque afortunadamente sin daños graves para los ocupantes del vehículo que esta madrugada chocaba contra un caballo que caminaba por la PO-313, la carretera que conecta las localidades de Marín y Moaña. El siniestro se produjo dentro del término municipal de este último municipio quince minutos antes de las seis de la madrugada. El vehículo sufrió daños de importancia como consecuencia del impacto con el animal, según informa la Policía Local.
En los últimos meses la presencia de caballos en este vial es habitual. Precisamente, durante el pasado verano los equinos mantuvieron en vilo día tras día a las fuerzas del orden de Moaña. Los agentes y Protección Civil acudían varias veces en la misma jornada a reconducirlos a los montes próximos para evitar que ocuparan la calzada y se acabase produciendo un accidente grave. Una lucha que continuó en los meses posteriores y que, a juzgar por lo ocurrido esta noche, se mantiene sin que los propietarios de las reses pongan medidas que eviten hechos como estos.

