Son los únicos puntos de carga para vehículos eléctricos de la comarca y están ubicados a los pies del Concello de Moaña. Se instalaron hace ya casi tres años pero nunca llegaron a funcionar pese a la demanda existente. La concelleira del ramo, la edil Dolores Chapela, asegura que su intención es sacar a licitación la gestión de estos cargadores para que sea una empresa externa quien se encargue de su mantenimiento. Lo hará con toda probabilidad en el mes de septiembre ante la imposibilidad de poder llevar a cabo el proceso administrativo que se requiere para este tipo de concursos durante el mes de agosto. Niega que el gobierno local esté pendiente de redactar y aprobar una ordenanza municipal para su uso, pese a que esta opción se había hecho pública en varias ocasiones. Al igual que los problemas de suministro eléctrico a los que se aludió tras las quejas por su retraso.
Estas electrolineras son pioneras en O Morrazo ya que ninguna estación de servicio cuenta con puntos de carga. Su instalación estaba incluida en el Plan de Mobilidade Urbana Sostible (PMUS) que vio la luz en 2019 de la mano del ex edil socialista de Mobilidade, Rodrigo Currás. Sin embargo no fue hsata dos años después cuando llegaron a colocarse suponiendo un desenvolso económico de algo más de 15.000 euros.
Según informó el gobierno bipartito en aquel momento, el sistema de carga semi-rápida de estos puntos permiten llenar las baterías más habituales de los coches eléctricos entre 3 y 4 horas.