Los restos óseos hallados en la fosa de Cabreiras, en Salvaterra, no corresponden a los cinco moañeses desaparecidos durante la Guerra Civil. Así se lo ha informado la concelleira de Memoria Histórica, María Ortega, a las familias tras cotejar el ADN de los restos con el de sus descendientes.
La exhumación se produjo hace un año y, aunque no se tenía la certeza, todo indicaba que podrían ser los de Eugenio Cancelas Corrales y su hermano Manuel, Manuel María Blanco Costa, José Benito Blanco Costa y José Vázquez Sampedro. Sin embargo, esta opción se ha desmoronado con los resultados.
Las conclusiones del Instituto de Ciencias Forenses Luis Concheiro de la Unidad de Genética Forense de la Universidad de Santiago señalan que en casi todos los casos se «excluye» a los donantes de las muestras como familiares de los desaparecidos, como ocurre con José María Blanco Costa. Los resultados descartan que sea el padre biológico de la donante. Al igual que Manuel Cancelas Corrales con la persona que ofreció cotejar su ADN.
En el caso de José Benito costa, no se han obtenido resultados que superen el umbral necesario para establecer una identificación o una exclusión genética, por lo que los resultados se consideran «inconcluyentes». También como tío biológico de la donante de la muestra MD-referencia-26. Ocurre lo mismo con José Vázquez Sampedro y Eugenio Cancelas Corrales.
A pesar de los resultados negativos, las muestras quedan custodiadas por la Unidad Forense de Santiago y cualquier persona que desee solicitar información adicional podrá hacerlo previa comunicación a la Universidad.

