La Diputación se defiende tras acusarle la Mancomunidade de retrasar las alegaciones y de poner en riesgo la seguridad jurídica de la ordenanza. PP, AV y Chapela arremeten contra el gobierno
Los plazos para aprobar la nueva ordenanza de recogida de la basura en la comarca de O Morrazo eran tan ajustados que finalmente han obligado a retrasarla un año, hasta 2027. El gobierno de la Mancomunidade no tuvo más remedio que reconocerlo ante los colectivos vecinales y económicos de Cangas, Moaña y Bueu, pero, eso sí, señalando a la Diputación como culpable de haber tenido que posponer la normativa por haber tardado “máis de sete días” en trasladar a la Mancomunidade las alegaciones presentadas a través de la Oficina Virtual Tributaria del ORAL. Como ejemplo, señala la presidenta, Araceli Gestido, una alegación presentada el 3 de diciembre no se derivó a la Mancomunidade hasta el 10 del mismo mes, pero cabe destacar que durante este período tuvo lugar el puente festivo de la Constitución.
La Diputación niega esta demora, defiende que solo recibió cinco reclamaciones, una cifra que supondría el 0,1 por ciento del total de las 3.600 registradas, y que las tramitó en “un prazo máximo de catro días hábiles” y, añaden, que pese al volumen de registros que recoge la plataforma a estas cinco alegaciones se les dio salida con “celeridad”. “Tramitáronse en tempo e forma, sempre co obxetivo de garantir a seguridade xurídica do procedemento”, afirman desde la administración que dirige el popular Luis López.
Este cambio de rumbo repentino ha sorprendido también a los partidos de la oposición. El PP de Cangas, Moaña y Bueu, a través de sus portavoces Dolores Hermelo, Alfonso Piñeiro y Elena Estévez, considera este aplazamiento “un enorme triunfo da cidadanía e un absoluto fracaso da política sectaria do Bloque baseada en actuar sempre contra os intereses dos veciños”. Y aprovechan para pedirle a los nacionalistas y socialistas a que “que rectifiquen dunha vez e retiren de inmediato a actual proposta para a suba brutal da taxa do servizo de recollida e tratamento de lixo”.
También la portavoz de Alternativa dos Veciños (AV), Victoria Portas, es tajante y crítica con el procedimiento, que dice se ha llevado a cabo con total “falta de transparencia”, “sin garantías” y sin informar a los partidos miembros de la Asamblea. Por este motivo, la exalcaldesa se encuentra a la espera de que la Mancomunidade le de acceso al expediente que alberga la realidad de esta ordenanza.
El edil no adscrito de Bueu, Daniel Chapela, también ha puesto el acento en la “incompetencia” del gobierno del ente supramunicipal y, particularmente, la “baixada de calzóns” del alcalde Félix Juncal ante su homóloga de Moaña, Leticia Santos, “para aplicar un modelo que él mesmo rexeita”. Augura que la intención es responder de forma “xenérica” a las alegaciones “e non atender o clamor social”.
HABRÁ MANIFESTACIÓN
Este cambio de planes de la Mancomunidad no ha frenado la intención de los vecinos de la comarca de participar en una manifestación prevista para el próximo lunes 22 a las puertas del Concello de Cangas. Consideran los convocantes que este retraso no significa que los gobiernos de Cangas, Moaña y Bueu cesen en su intención de implantar lo que denominan un “sablazo” a los vecinos y al tejido empresarial de los tres concellos.
Una cita que no está impulsada por ningún partido político ni colectivo social ni económico concretos, sino que parte de la ciudadanía que se revela a tener que pagar a la Mancomuniade do Morrazo un canon “abusivo” aunque sea con un año de retraso.
Esta marcha demanda “taxas xustas según o uso real” y “transparencia”. “Subir impostos non soluciona a mala xestión”, advierten aquellos que comparten el fondo de esta convocatoria organizada para “defender os nosos dereitos”. “É necesario”, claman.