La lancha de salvamento que cada verano utiliza el servicio de socorrismo de Cangas, propiedad del Concello, no pasó el pasado mes de mayo la inspección técnica periódica (ITB), similar a la que están obligados los vehículos, que realiza anualmente la Dirección General de la Marina Mercante en las instalaciones de Capitanía Marítima de Vigo. En el informe del inspector que realizó la revisión en seco, es decir, en tierra, constan deficiencias que le impiden obtener el certificado de navegabilidad como “casco de PRFV agujereado”, por lo que urge a su reparación, además de que tiene “el poliuretano a la vista y mojado”.
De esta manera, señala el documento resultante del reconocimiento de la zodiac “Salvacangas dous”, para su uso el Concello de Cangas debe “reparar el casco de poliester, pegar los amarres del casco de neopreno y reforzar el despegado de proa”.
Según el responsable del servicio de Emergencias de Cangas, Cesáreo Coya, en este momento “se está trabajando en ella para ver si es posible repararla”. Esto significa que no estará operativa el inicio de la temporada estival, que arranca en tres días, aunque Coya aclara que “no es obligatorio tener embarcación porque la competencia solo es en zona balizada”.
En cualquier caso, este tipo de incidencias con esta zodiac son habituales. Cabe recordar los conflictos que ya en 2019 se hicieron públicos entre Xosé Manuel Pazos y una patrona, que se quejó tras un pleno de la falta de embarcaciones de salvamento. Estas deficiencias, totalmente previsibles cada año, se han ido arrastrando hasta el día de hoy. Aun así, Protección Civil cuenta con otra lancha mucho más nueva que solo se usa en contadas ocasiones.