Una orden de ayudas dirigidas a particulares y concellos de menos de 20.000 habitantes para reforma de inmuebles ha movilizado ya 9,6 millones de euros en cuatro años
Lucha contra el feísmo y apuesta por el ‘fermosismo’. Ese es el objetivo de las ayudas creadas por la Xunta de Galicia para la corrección de impactos paisajísticos que permiten a los propietarios, instituciones públicas o particulares, mejorar el estado de sus inmuebles.
Esta iniciativa contó este año con un presupuesto de dos millones de euros repartidos entre sus posibles destinatarios: un millón de euros para las entidades locales de menos de 20.000 habitantes y el otro dirigido a propietarios privados, llegando a sufragar en ambos casos hasta el 70 por ciento del coste de las actuaciones. En el caso de los concellos podrán optar a un máximo de 40.000 euros repartidos en dos líneas de un máximo de 20.000 cada una.
¿Qué acciones?
Concellos: Podrán ser subvencionables con esta orden los trabajos de renovación y acabado exterior de fachadas, cubiertas y muros de cerramiento en edificios municipales dentro de la primera línea, mientras que con la segunda se podrá mejorar el aspecto y conservación de elementos etnográficos como fuentes, lavaderos públicos, palcos de música u hórreos.
Particulares: Como novedad, en esta convocatoria se incluye la posibilidad de retirar elementos adyacentes que perjudiquen la imagen o causen algún impacto en los bienes en los que se quiere intervenir. Se mantiene también, como en convocatorias anteriores, la financiación de obras en cubiertas, muros y fachadas.
Demanda en aumento
Estas ayudas cuentan cada vez con mayor demanda. Según la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático, este año se aprobaron 50 ayudas a concellos para 64 actuaciones y 346 a particulares, hasta agotarse los 2 millones de euros presupuestados.
De hecho, la Xunta de Galicia concedió en los últimos cuatro años (2021-2024) un total de 2.374 ayudas a entidades locales y a propietarios privados por importe de cerca de 9,6 millones de euros para la corrección de impactos paisajísticos, lo que supone la movilización de una inversión global de 14 millones de euros.