Fue uno de los puntos aprobados por unanimidad en pleno en septiembre d e 2024 pero la regidora asegura que los técnicos municipales desaconsejan esta adquisición
Fue una demanda plenaria del PP que contó con el apoyo de todos los partidos políticos de la corporación de Cangas. En septiembre de 2024 salió adelante por unanimidad pero casi un año después nada se sabía del compromiso que adquirió el tripartito de comprar un desfibrilador para las instalaciones deportivas de Rodeira, conocidas como las del Keniata. Sin embargo, la alcaldesa, Araceli Gestido, finalmente ha reconocido a Atlántico que el Concello no llevará adelante esta adquisición porque así se lo han desaconsejado los técnicos municipales de emergencias alegando que “este punto está a un minuto de la base de emergencias de A Rúa”. Por lo tanto, argumenta, “consideraron que la zona está perfectamente cubierta tanto en el verano como en el invierno”.
La máxima representante del Concello cangués asegura que los mismo técnicos de emergencias “reprocharon” al gobierno local que votasen antes de consultarlo “con quien sabe”. “Me parece un reproche justo, porque antes de decidir donde invertir el dinero está bien hacerlo con un criterio más eficiente”, opina.
La demanda de adquirir de forma oficial al Concello un desfibrilador para atender emergencias en las instalaciones deportivas de Rodeira partió del club de Fútbol a Pie tras varios sustos por paradas cardícacas mientras se disputaban partidos, algunos de ellos con el peor de los desenlaces. El último, en diciembre del año pasado cuando un árbitro murió a los 63 años mientras se encontraba en el campo. Además, directivos y técnicos se formaron para saber utilizarlo a través de la Asociación Forsagal.
RIFAS PARA PREVENIR
Ante la falta de un desfibrilador en Rodeira, los padres y madres de los deportistas del Club Voleibol Maniotas decidieron llevar a cabo un sorteo de rifas para adquirir uno de estos aparatos para mejorar la rapidez en la intervención en el entorno del pabellón, donde entrenan. La iniciativa tuvo tirada y pocos meses después lograron el dinero para comprarlo. Desde el pasado mes de marzo el club guarda el desfibrilador en el cuartel de la Guardia Civil que se ubica a pocos metros de las pistas deportivas.