Su viuda prevé abrir el próximo verano el Museo Xosé Manuel Pazos en la que fuera su casa natal en Coiro. El espacio acogerá las obras literarias y la trayectoria política en el Concello y en el Parlamento gallego
Xosé Manuel Pazos falleció siendo alcalde en 2021, pero su legado no solo no se perderá sino que perdurará para siempre expuesto en su parroquia natal, Coiro, y en la vivienda en la vivió con sus padres desde 1957, una pequeña casa conocida como ‘Casa da Inquisición’ y por la que Pazos siempre mostró especial cariño. El próximo verano se convertirá en el museo que albergará su obra literaria, teatral y también política, los tres pilares que marcaron la vida del regidor y que su viuda, María José González, ha querido recopilar para “preservar toda a memoria” porque “o merece” y porque “merece ser coñecido por todos os cangueses e canguesas”. El camino de este proyecto tan personal arrancó todavía con el dolor de la pérdida y ha servido a María José como herramienta para superar el duelo y tratar de ocupar el vacío que dejó el que fuera su marido durante las últimas décadas de su vida.
El pasado sábado se dio el primer paso, la firma protocolaria de la asociación Museo Xosé Manuel Pazos, que será la organización formada por una decena de personas y que gestionará el presente pero, sobre todo, el futuro de este centro cultural. Su directiva está formada por la propia González como presidenta, los dos hijos que Pazos tuvo como vicepresidentes, Xulio Lago Alonso en representación de la Academia Galega de Teatro, Alfonso Becerra en el de la Asociación de Escritores de Lingua Galega y de la Revista Galega de Teatro, el periodista Leoncio González, el cangués Camilo Camaño de la Casa Museo A Mangallona, el abogado y amigo personal de Pazos, José Antonio Cid, la ilustradora moañesa Luz Veloso, y la amiga personal de la familia, María José Fernandez como Tesorera. Todos ellos buscan convertir la vivienda en un punto de dinamización de la parroquia a través de la figura de Pazos.
La labor de investigación de la propia María José González y de los múltiples amigos del exregidor permitirá al museo albergar en papel y también en formato digital gran parte de sus fondos bibliográficos, textos escritos por él y publicados, especialmente su obra teatral publicada en la Revista Galega de Teatro con la que colaboraba, sus crónicas sobre A Mostra de Teatro (fundador y director) para Atlántico, textos editados por Galaxia y un sin fin de colaboraciones para diferentes entidades y medios, además de 40 traducciones de todo tipo de dramaturgos. De todas las creaciones destaca el poema dramático de María Soliña cuyo texto original de 1988 sufrió tres ampliaciones más para adaptarlo a la representación actual de A Defensa da Vila-María Soliña.
No puede faltar su larga lista de premios dentro y fuera de Galicia, en vida y también a título póstumo. Entre los más importantes destacan los Max de Teatro que recibió en 2003 y 2008.
Si la vida literaria de Xosé Manuel Pazos fue intensa, en la política local y autonómica también ha sido un referente. En el Museo podrán volver a leerse las intervenciones durante su cuatro años como diputado en el Parlamento de Galicia, su papel como edil y alcalde durante varias legislaturas en el Concello cangués.