Llevan cinco años luchando para que el Concello de Cangas arregle este vial público de acceso a su vivienda que cuando llueve es un lodazal. La alcaldesa dice que ejecutará la obra en 2026
Que un ciudadano entre y salga de su en casa sin embarrarse hasta la rodilla cuando llueve es un derecho que cualquier contribuyente debería de tener, al menos dentro del núcleo urbano, pero en el caso de la joven Ruth Lorenzo, la situación es todavía más grave. Tiene 19 años y padece síndrome de Marfan, una enfermedad que afecta a los huesos y que le obliga a depender de una silla de ruedas para desplazarse. Sin embargo, el camino que lleva hasta su vivienda le impide poder utilizarla y son sus familiares quienes tienen que cogerla en peso para recorrer los apenas 30 o 40 metros que la separan del tramo hormigonado por otros vecinos que decidieron costearlo de su bolsillo.

Al contrario de lo que pudiera parecer, su calle es pública, es decir, propiedad del Concello. Conocida como Grunxeiras se ubica a apenas unos metros de la Avenida Espíritu Santo, en la parroquia de Coiro. Sin embargo, llevan cinco años aguardando que el gobierno local se haga cargo de ella y, al menos, vierta cemento para permitir que Ruth pueda atender a su rutina diaria sin necesidad de vivir una odisea cada vez que cae una gota sobre el terreno. Acude a diario a un centro educativo de Vigo y el taxi que la recoge no puede acceder hasta la puerta de su casa. Tras las intensas lluvias de este jueves el agua brotaba por el único sendero de tierra que le lleva a ella.
Su madre, Irene Vives, lucha incansablemente porque el Concello asuma su responsabilidad pero hasta el momento solo ha recibido falsas promesas y, en muchas ocasiones, malas palabras o el silencio como respuesta. “El último mensaje a la concelleira Sagrario Martínez (de Obras e Servizos) para preguntarle qué iba a hacer que el invierno se estaba acercando fue a mediados de este mes y todavía no tengo contestación ninguna” , manifestaba Vives.
Según la alcaldesa, Araceli Gestido, el arreglo de este camino se financiará a través del Plan +Provincia de la Diputación de 2025, aunque los trabajos no se ejecutarán hasta el segundo trimestre del año que está a punto de comenzar. Un retraso que se ha debido, justifica la regidora, a recibir los diferentes informes sectoriales de Patrimonio “que chegaron hai un pouco” y al proceso de licitación del proyecto, que ya se está trabajando desde la administración local. La intención es dejar pasar el período de mayor cantidad de lluvias para comenzar con los trabajos.

