La terraza instalada este fin des emana en todo lo ancho de la calle.

La Policía Local acudió y levantó acta de las mesas y las sillas en medio de la vía pública pero no obligó al establecimiento a levantar la terraza. «Hubo un malentendido», afirma la alcaldesa

Un hotel de Cangas ya es conocido por cortar una céntrica calle, concretamente la rúa Gondomar, para instalar su terraza en fin de semana. Este hecho ya ocasionó polémica en Navidad y el pasado sábado volvió a hacerlo. Sin embargo, al menos en esta ocasión, no contaba con permiso del Concello para ello. La alcaldesa, Araceli Gestido, asegura que aunque el establecimiento solicitó autorización desde el día 20 pero «por un simple malentendido» la instaló «antes de tener permiso por escrito ya que faltaba el informe». Un informe que «estará mañana», avanza la regidora, y será cuando se sepa «si pueden hacerlo o no».

Aun así, la Policía Local acudió este fin de semana a la terraza y levantó acta de la colocación del mobiliario taponando la calle, que se encontraba vallada y por la que era inviable cruzar en coche para acceder, por ejemplo, a la concurrida Avenida de Marín. Sin embargo, los agentes, pese a no contar con autorización municipal, no obligaron a la propiedad a retirar la terraza.

La potestad para sancionar la tiene el gobierno local, pero Gestido ya avanza que no será así e insiste en el «malentendido».

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