“Estoy contenta”, con estas palabras y con una gran sonrisa en la boca comenzó su discurso la portavoz del PSdeG en el Concello de Cangas, Iria Malvido. Y es que en la bancada del gobierno desde el inicio de la sesión se hablaba ya con soberbia, como ganadores. Pese a que las cuentas no salieron adelante con holgura, sino con el voto de calidad de la alcaldesa, Araceli Gestido. Todo lo contrario que en la oposición, que advertió reiteradamente que irán “hasta las últimas consecuencias” por considerar que el gobierno local y los técnicos municipales están “coartando nuestros derechos” al no contestar a la enmienda presentada el 23 de julio y continuar con la celebración del pleno. El portavoz popular en materia económica, el edil Pío Millán, presentó al inicio del debate un documento solicitando un informe jurídico de la Secretaría Municipal en el que se analizase si la sesión cumplía con la legalidad y, por tanto, la suspensión cautelar del pleno hasta obtener la opinión técnica. Algo similar a lo que la otra pieza de la oposición, la ex alcaldesa Victoria Portas como portavoz de Alternativa dos Veciños, ya trasladó a la comisión informativa previa al pleno. Como era de esperar, el gobierno local rechazó estimar la propuesta y continuó conforme a lo previsto.
Fue un arduo debate en el que Portas no estuvo presente, aunque sí en boca de las representantes del gobierno local. La socialista defendió la capacidad de diálogo del ejecutivo del que forma parte “para llegar a un acuerdo con AV” y calificó las cuentas municipales recién aprobadas como “las más participativas”. A continuación, la edil de Facenda, Xiana Abal, dio un discurso contrario a su antecesora. Acusó a Portas de intentar reventar los presupuestos al pedir el informe técnico. Sin embargo, ningún miembro del gobierno, ni tampoco los técnicos presentes, explicaron porqué no se había contestado a la enmienda de los populares. Sí recogía la propuesta de Alcaldía la desestimación de todas las alegaciones, no solo las del PP, también las de la Policía Local y las de un trabajador municipal. “Este presupuesto se aprueba con el rechazo de la mayoría de trabajadores de esta casa” y “en contra del 50 por ciento de los vecinos de Cangas que nos han votado”, expresó.