No hay fiestas sin atracciones. Y pese a la psicosis provocada por el dramático accidente que le costó la vida a un joven en el saltamontes de las celebraciones de la parroquia de Matamá, en Vigo, los municipios y las comisiones de fiestas no quieren renunciar a los cacharritos porque saben que son un elemento dinamizador para las familias. Sin embargo, sí que extreman las precauciones y los concellos miran con lupa que toda la documentación esté en regla. A falta de un par de semanas para que arranquen las Fiestas del Cristo de Cangas, la concelleira responsable de Cultura, Aurora Prieto, quiere aclarar que el Concello tiene contratada una empresa que será la encargada de supervisar todas las atracciones antes de su instalación. Por eso, ha establecido un plazo para la entrega de toda la documentación, que finaliza mañana 9 de agosto.
Se trata, entre otros papeles, del seguro de Responsabilidad Civil (RC) y una declaración responsable. A partir de ahí se comunicará si “están aptas para poder trabajar» en caso de que haya algo que no esté correcto “obraremos en consecuencia”. “Lo hacemos con todas las asociaciones y colectivos que organizan actividades porque la primera interesada en que todo salga bien soy yo”, precisó Prieto insistiendo en que tiene la “tranquilidad relativa” de que “todo va a estar bien”. Por el momento ya presentaron la documentación en torno a 22 atracciones y entre ellas no se encuentra el saltamontes implicado en el accidente mortal de Vigo.
CAÍDA DE LA CORNISA
Un incidente agrió las Fiestas del Cristo en 2023. La cornisa de una casa sobre la que estaban enganchados los cables de la iluminación se vino abajo hiriendo a varias personas, la mayoría de carácter leve, y dejando daños de mayor importancia en otra. Aun así, reconocía la edil. «tuvimos una suerte bestial” aludiendo a que si hubiese caído durante las procesión del Cristo las consecuencias hubiesen sido mucho peores. Ahora el caso está en los juzgados, por la vía civil, para dirimir responsabilidades.